Los fiscales de Florida están buscando la pena de muerte para el miembro de la pandilla MS-13 acusado de decapitar a un conductor de Uber Eats, revelando que el inocente hombre de familia había sido apuñalado 35 veces.

El fiscal estatal Bruce Bartlett presentó un "aviso para buscar la pena de muerte" contra Oscar Adrián Solís Jr., de 30 años, el viernes, el mismo día en que el pandillero fue acusado de asesinato en primer grado y abuso de un cuerpo humano muerto, ambos delitos graves, según muestran los registros judiciales.

Las circunstancias agravantes enumeradas incluyeron que "el delito capital fue especialmente atroz y cruel".

Nunca había visto algo como esto antes", dijo Bartlett al Tampa Bay Times. "No puedo concentrarme en cómo un individuo puede ser tan vil", dijo sobre el gángster MS-13 y su masacre aparentemente aleatoria.

Solís fue captado en un video de seguridad arrastrando a Randall Cooke, de 59 años, a su casa en Holiday mientras entregaba comida el 19 de abril, según las autoridades. Dentro de la casa, Cooke fue apuñalado 35 veces, dijo Bartlett al medio local. 

La víctima fue cortada y desmembrada. Según la información que se dio al Tampa Bay, entre las bolsas de basura que Solís fue visto tirando había un pie humano.

Historial criminal

Solís se había mudado a Florida en enero, cuando fue puesto en libertad condicional después de cumplir cuatro años en una prisión de Indiana por asalto y robo.

Tiene una larga hoja de antecedentes penales que también incluye apuñalar a un compañero de prisión.

Ese registro también fue catalogado como una circunstancia agravada que justifica la pena de muerte, escribió Bartlett en su aviso.

El acusado fue condenado previamente por otro delito capital o por un delito grave que involucra el uso o la amenaza de violencia contra la persona", escribió.

Solís permanece bajo custodia antes de una lectura de cargos programada para el 6 de junio, según los registros.

Con Información de El Imparcial.