Panistas abren las puertas de México a Vox y al intervencionismo extranjero
Jesús Reyes Heroles -uno de los viejos políticos del PRI- expresaba que “seremos inflexibles en la defensa de las ideas, pero respetuosos en las formas, pues en política, frecuentemente, la forma es fondo”.
En últimas fechas, el Partido Acción Nacional (PAN) nos tiene acostumbrados a su falta de rumbo. Su propuesta programática, su proyecto de nación, sus iniciativas y planteamientos, su exposición de ideas y opiniones giran en torno a un solo eje: El discurso de odio en contra del actual gobierno. No son más que eso, son sólo eso. Rencor, resentimiento, aversión, clasismo, racismo, desprecio, mentiras (muchas mentiras) farsas, invenciones y calumnias.
¿Y qué es lo que sucede en política cuando alguien se encuentra en crisis y no puede articular un discurso propio? Sencillo: te vendes al mejor postor. Sin límites ni restricciones éticas, morales o de profundidad histórica no hay diferencia entre pactar con dioses o demonios.
La visita de Santiago Abascal, presidente del partido de ultra derecha Vox de España, a los senadores de Acción Nacional es un excelente indicador de la crisis por la que atraviesa ese instituto político.
No fue una reunión insignificante como trataron de hacerla ver: Se realizó en las instalaciones del Senado (encargado, entre otras tareas de ver por las relaciones de México con todos los países), en horario laboral, con presencia de senadoras y senadores que tendrían que haber estado en el pleno discutiendo y votando las leyes que interesan a la ciudadanía, firmaron un documento de intenciones que es a todas luces contrario al lema “La Patria es Primero” que sirve de telón de fondo al salón de plenos y luego en un acto de cobardía -aún peor que la mismísima firma del documento- los participantes se retractaron de lo hecho de formas por demás patética. No les importó ni la forma ni el fondo y en ese descuido quedaron exhibidos y en ridículo al interior de su partido y al exterior con todo el país pues fue nota en todos los medios de comunicación.
Sí, son del partido político de donde surgió el presidente más idiota que ha tenido el país, @VicenteFoxQue y el otro, el que arrastra un hilo de sangre por donde quiera que pasa y pisa; @FelipeCalderon https://t.co/eFYmvMBgCp
— J. Jesus Esquivel (@JJesusEsquivel) September 3, 2021
Pero ¿Y si no fue un error, sino un aviso? No debemos de tomar a la ligera este episodio. La historia de Acción Nacional -ligado históricamente a la iglesia y a los sectores más reaccionarios y conservadores del país- está llena de eventos y defensas de las peores causas para el país. Rafael Barajas “El Fisgón”, los desnuda en sus pláticas y sus libros, donde documenta los orígenes de ese instituto político.
Tampoco debemos de olvidar que -en palabras de Jesus Esquivel– “son (d)el partido político de donde surgió el presidente más idiota ha tenido el país, VicenteFox y el otro, el que arrastra un hilo de sangre por donde quiera que pasa y pisa; Felipe Calderón.”
Acción Nacional descuida forma y fondo. Se encuentran heridos al interior y desacreditados al exterior y como cualquier animal herido son mucho más peligrosos. La reunión con el presidente de Vox es un botón del riesgo que encarnan y de la profunda crisis que atraviesan. El mensaje que lanzan es que no se detendrán ante nada con tal de recuperar el poder.
Nuestra tarea, como ciudadanía informada, debe de ser la de visibilizar y cuidar a los personajes que buscan en el extranjero lo que no pudieron obtener en las urnas. Debemos de recordar que esto no es un hecho aislado: en Acción Nacional han pedido al presidente estadounidense Joe Biden y a Luis Almagro de la OEA que intervengan en nuestro país. La unión con Vox va en la misma línea.
En Acción Nacional le están abriendo las puertas del País a una intervención extranjera.
¿Será muy difícil recordarles que están ahí para representar los intereses de nuestro País? ¿Ya olvidaron que “La Patria es Primero”?
Con información de Polemón