Arranca ya el cuarto mes de gobierno obradorista en México y no se ha tocado el tema de la marihuana legal. Esta fue una de las promesas más sólidas de la ahora secretaria de gobernación, Olga Sánchez Cordero, quien prometió que este país tendría un gran avance en el combate al narcotráfico con la legalización de una planta que inició todo en la historia del contrabando mexicano.

Los empresarios, accionistas, inversores y personas que están ligada a esta planta esperan desde hace meses avances en el tema de la legalización mexicana. Los primeros grandes pasos se dieron durante el sexenio peñista, cuando se permitió el consumo y la portación moderada de marihuana. Además, la suprema corte también abogó para que varios mexicanos interesados pudieran sembrar y cosechar la planta para uso médico y recreativo en sus hogares.

El mercado internacional de la cannabis legal apunta a crear más de 150,000 empleos en los próximos años y muchos de ellos podrían generarse en México.

En un encuentro entre Ricardo Monreal y el presidente mexicano, se habló durante un buen tiempo de este tema. La intención es empezar a impulsar el debate sobre la legalización total de la cannabis en el país, también con miras a silenciar las críticas a la complicada reforma educativa de Obrador.

Como una vuelta de tuerca política, el presidente mexicano estará próximamente abriendo el tema a debate nacional. Recordemos que México es uno de los países que más cosecha marihuana en el mundo, pero todo bajo el control de grupos del narcotráfico que han atormentado a comunidades rurales en donde la siembra de marihuana es un asunto histórico. Morena sabe que adeuda esta iniciativa, por lo que la sacará del baúl próximamente.

El tema de la legalización claramente encontrará un muro con los partidos opositores. El PAN es el principal actor en contra del uso lúdico de la cannabis, dejando en claro por qué iniciaron una guerra hace doce años en contra de esta y otras drogas. Los morenistas tienen que redactar muy bien cómo es que funcionará la legalización en el país, ya que hay inversores y empresas que inyectaron recursos fuertes en México sin que haya avances.

Incluso el expresidente Vicente Fox es uno de los más emocionados con esta propuesta de Morena.

Lo cierto es que la legalización de la cannabis y el aborto son dos temas bastante populares que el presidente mexicano no ha querido tocar a fondo. Durante la campaña presidencial, López Obrador logró evadir demasiado las preguntas sobre este tema, dejando toda la carga a su segunda al mando. Ya como presidente, prometió grandes avances en materia de legalización que aún no aparecen.

Con escándalos como la reforma laboral y la educativa al frente, parece que es hora de sacar el tema de la legalización para jalar la atención.