El primer año de gobierno del presidente López Obrador dejó pocas ganancias al mercado local de capitales. El S&P/BMV IPC, el principal índice accionario, acumuló un rendimiento de 3.28%, al ubicarse en 43,100.12 unidades, nivel en el que finalizó la jornada del jueves, en un contexto de guerra comercial y desaceleración económica mundial.

James Salazar, subdirector de Análisis de CIBanco, explicó que las políticas públicas implementadas por cada administración tienen un impacto en la Bolsa mexicana. En este caso, recordó que López Obrador empezó a dar línea de cómo sería su estrategia desde antes de tomar posesión.

En ese sentido, en muchos de los temas la Bolsa se adelantó, como en la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México, y alguno s relacionados al Congreso, como el de las comisiones bancarias, que en cuanto se filtraron empezaron a mermar en la Bolsa de valores”, explicó.

Agregó que la mayoría de los anuncios que se han hecho en la política pública no han sido del todo bien tomados por la Bolsa, como las licitaciones de la reforma energética y modificaciones de contratos que han afectado el comportamiento de las emisoras.

En el primer año del gobierno de Enrique Peña Nieto, el índice referencial mexicano tuvo un magro avance de 0.73%, en un año de debilidad económica, y posterior a una temporada alcista en el mercado local de capitales. En el mismo periodo, pero en el inicio de sexenio de Felipe Calderón, el índice registró un alza de  20.06%, mientras que con Vicente Fox fue de 3.86 por ciento .

“Al 28 de noviembre (desde enero), el S&P/BMV IPC tiene en el 2019 un avance de 3.1%, mientras que durante todo el 2001, el primer año de Vicente Fox más diciembre, la Bolsa ganó 3.2 por ciento. 

“Aún falta un mes para que acabe el año. Creo que el IPC quedará como con Fox en su primer año, por abajo que con Felipe Calderón, pero superior a Peña Nieto”, dijo Gerardo Copca, analista del mercado de capitales de MetAnálisis.

Comentó que siempre el primer año de una administración causa incertidumbre, pues cambian los planes de un gobierno a otro.

“Esta vez hubo más incertidumbre que de costumbre, sobre todo porque ha habido cosas en este gobierno que no han gustado, que generan más dudas que respuestas, a demás del enfrentamiento que ha habido entre el gobierno y los empresarios. Tampoco gusta que la economía no haya crecido”, sostuvo.

Copca dijo que tradicionalmente el mercado mexicano se movía siguiendo a Wall Street, que este año ha roto muchos récords máximos. “Pero a la incertidumbre mexicana se le suma la que ha generado el presidente estadounidense Donald Trump con su guerra comercial, que le ha pegado a los mercados emergentes”.

Peso recupera terreno

En el caso del tipo de cambio, el peso muestra una apreciación de 4.37%, desde 20.4530 pesos por billete verde cuando asumió el cargo López Obrador, a su cierre de ayer en 19.56 pesos por dólar, según datos del Banco de México (Banxico).

Jorge Gordillo, director de Análisis de CIBanco, explicó que la paridad se ha beneficiado de factores externos, pues éstos explican alrededor de 80% de su comportamiento.

“Le han jugado a favor varios temas externos, no sólo al peso, sino a la mayoría de monedas emergentes. El hecho de que la Reserva Federal (Fed) ha bajado tasas es un elemento que le gusta a las inversiones de mayor riesgo, les favorece.

“Tuvo suerte el gobierno con este escenario de bajas tasas de interés en Estados Unidos, y luego internamente ha mantenido tranquilo al inversionista extranjero que ha mantenido sus posturas de no desequilibrios como las finanzas públicas (…) y la percepción de autonomía del Banxico”, puntualizó.

Para Copca, el peso debería estar más depreciado, “pero se ha logrado controlar igual que la inflación”.

Con información de El Economista.