La oposición en México y particularmente, en la Ciudad de México, tiene un estigma de descrédito que no puede quitarse después de la gestión de Miguel Mancera. Una marca con la que carga todos los días, que no pueden eludir y que determina su manera de hacer política.
Su desesperación es grande y se ve reflejada en sus “estrategias” de ataque.
Ante un gobierno que comienza a dar resultados, los operativos que impulsa la oposición en redes sociales para golpear a la jefa de gobierno de la capital, Claudia Sheinbaum, rayan en lo ridículo y lo absurdo.
El día de ayer, políticos como Fernando Belauzarán y Javier Lozano y algunos supuestos “influencers”, quisieron denostar las políticas a favor de la movilidad no motorizada que impulsa el gobierno de la ciudad publicando una foto “fake” que muestra a la Sheinbaum con un casco de bicicleta colocando de forma incorrecta en su cabeza.
Lo hostil y burdo del montaje dio pie a qué usuarios de la Ciudad de México cuestionaran la intención de la fotografía y del operativo que inició desde la cuenta del usuario @Vampipe y al que pronto se sumaron algunos políticos que aún no asumen su responsabilidad política como oposición.
Desvirtuar y atacar a un gobierno que está limpiando de corrupción la Ciudad y está apostándole a la bicicleta y al transporte eléctrico como una opción real de de movilidad, no parece ser la mejor forma de buscar el favor del voto en el 2021.
Parece que la oposición aun no entiende que su papel debería ser mucho más propositivo, evitando dejarse llevar por el odio personal y la descalificación.
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