Redacción
Ni un mes en la cárcel duró Lized
Yuridia “N”, alias “Big Mama” o “La Chofis”, quien fungía como supuesto enlace
entre los líderes de la Unión Tepito y la policía capitalina, luego de que la
autoridad no logró demostrar los delitos por los que la acusaron y salió bajo
fianza.
Había sido detenida el 3 de
agosto pasado. La señalaron por ser la persona que corrompía a los uniformados
entregándoles dinero a cambio de protección e información para este grupo
criminal y era la encargada de la estructura financiera de los delincuentes
tepiteños.
La identificaron como el “brazo
derecho” de “El Lunares”, uno de los líderes de la Unión Tepito, pero a decir
del juez que llevó su caso, ni el Ministerio Público (MP), ni la Fiscalía de
Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX) ni la Secretaría de Seguridad
Ciudadana (SSC) pudieron demostrar su presunta responsabilidad en delincuencia
organizada, lavado de dinero y narcomenudeo.
Lized Yuridia “N” ha sido
detenida en 2005 y 2013 acusada de delitos contra la vida, la integridad
corporal, lesiones graves y contra el servicio público cometido por
particulares, así como resistencia a la autoridad.
Estaba presa en el penal femenil
Santa Martha, pero fue liberada en 2006 después de ocho meses y siete días de
condena. Años después volvió, pero solo por seis meses, pues consiguió la
libertad bajo fianza.
El 3 de agosto que fue
reaprehendida, la identificaron como una de las personas de mayor confianza de
Óscar Andrés Flores Ramírez, “El Lunares”, líder de la Unión Tepito en la
Ciudad de México y actualmente preso en un penal de máxima seguridad.
De acuerdo con la Policía
Preventiva, Lized Yuridia “N” era parte de un grupo de élite que cuidaba y
brindaba seguridad a Flores Ramírez en la vecindad Peralvillo 33, colonia
Morelos.
También la señalaron como la
encargada de vender y distribuir drogas a diversos grupos narcomenudistas de la
capital del país, además de realizar envíos de drogas a Tlaxcala. La señora
usaba a sus hijos para el trasiego de drogas, desde el empaque hasta la entrega
y recolección de las ganancias ilegales.
Después de la detención de “El
Lunares” y de su sucesor, Brandon Alexis Flores Ramírez, “Junior”, Lized Yadira
“N” se fue a Michoacán, después a Guanajuato, pero seguía controlando el
negocio de las drogas a través de sus vástagos.
Con información de Proceso