Juan Carlos Leal Segovia, único diputado del Partido Encuentro Solidario (PES) en el Congreso de Nuevo León, propuso en agosto diversas iniciativas contra la difusión de información sobre el aborto, el cambio de sexo de menores de edad, e incluso la “donación o utilización de embriones, células y tejidos embrionarios con fines comerciales y de investigación”.

Propuso proyectos contra la difusión de información sobre el aborto, cambio de sexo de menores de edad, así como la “donación o utilización de embriones, células y tejidos embrionarios con fines comerciales y de investigación”, informó Animal Político.

Argumentó que el aborto es un “genocidio silencioso contra la humanidad” y debe prohibirse la difusión de información sobre fármacos para la interrupción de embarazos.

“Desgraciadamente en México existen diversas iniciativas impulsadas por diversos legisladores que ideológicamente han sido engañados para promover este genocidio silencioso contra la humanidad”, dijo el 5 de agosto.

Ese mismo día envió una iniciativa para prohibir la “telemedicina”, en torno al asesoramiento o tratamiento médico que cualquier persona puede recibir a distancia.

Sobre el tema dijo que esta propuesta surge tras percatarse de que “la Secretaría de Salud (SSa) al ver que no se está legalizando el tema del aborto en los estados, quiere utilizar la telemedicina”. Consideró que utilizar la telemedicina en un estado donde el aborto es ilegal y tiene que ser un delito.

Por ello el 12 de agosto envió otra iniciativa para prohibir la publicidad sobre uso de medicamentos “abortivos que promuevan el aborto”, pues acusa que en redes sociales, así como en varios medios, se fomenta el uso indiscriminado de medicamentos como Misoprostol para inducir el aborto.

El legislador de PES envió una iniciativa el mismo día “contra las terapias hormonales, la mutilación de órganos sexuales y cirugías plásticas de reasignación de sexo en menores de edad”, pues considera se puede poner en riesgo su salud mental u orgánica en la edad adulta y la “distrofia de género” debe tratarse con psicoterapia, misma que deberá ser solicitad por tutores, autoridades educativas o personas que estén en contacto con niños que “presenten alteraciones de conducta que permitan suponer la existencia de enfermedades mentales”.

“No puedes permitir que un menor elija una cirugía si primeramente no puede tomar una bebida o un cigarro, le prohíbes una bebida como un refresco, pero le quieres permitir que se cambie de sexo en una cirugía. Eso es incongruente”, manifestó.

De igual forma, el 5 de agosto pasado, Leal Segovia envió otra iniciativa “para regular el uso de las células troncales o progenitoras, donación y utilización de embriones, células y tejidos embrionarios con fines comerciales y de investigación”.

En ese contexto mencionó que podrían ser utilizadas para “industrialización y comercialización”, que puede dirigirse incluso a la industria cosmética y alimentaria en países de tercer mundo.

De acuerdo con la información manifestada en sus documentos, el senador de PES afirma que existe una investigación en Estados Unidos contra una empresa que presuntamente intentó comprar “partes de bebés a cambio de pagos con Lamborhinis”.

Añadió que “la producción de embriones humanos con fines de investigación o para el mercado de transferencia de embriones podría ser tratada para la creación de bancos de embriones para utilizarlos en un mercado de trasplantes de tejidos y de células fetales diferenciados”.

En ese contexto insistió en la posibilidad de que ello se efectúe con “embriones muertos por aborto provocado”, razón por la cual es importante regular estos temas en Nuevo León.

Con información de El Informativo.