
Desapareció Irma Reyes, la humilde mujer que entregó a su sobrino Mario N y a la pareja de éste, Giovana N, presuntos autores del feminicidio de la niña Fátima.
Sus vecinos, en el municipio de Isidro Fabela, Estado de México, se encuentran temerosos, prefieren no hablar ni dar entrevistas.
Lo poco que refieren es que la señora abandonó su casa, al parecer por haber recibido amenazas de muerte.
Cabe recordar que Irma Reyes se hizo acreedora a la recompensa de dos millones de pesos ofrecida por la Fiscalía capitalina, pero dijo que no le interesaba cobrarla. Su indignación por el crimen fue lo que la motivó, dijo.
Este lunes, el presidente Andrés Manuel López Obrador hiciera un llamado al Gobierno de la CDMX a entregar la recompensa a la mujer, cuyo paradero ahora se desconoce.
Esta nota incluye información de: Telediario