Redacción
Un montón de cabezas negras de ganado degolladas; plumas y huesos ensangrentados; gatos, perros, mapaches y ciervos enjaulados hacinados a lado de bolsas mosqueadas; ranas en cubetas; cocodrilos con bozales… Por la sangre, vísceras y escamas que inundan el suelo después del asesinato brutal de los animales silvestres y domésticos, que son comprados en puestos al aire libre, se les llama mercados húmedos. Hay en India, China, Vietnam, Tailandia y otros sitios como Nueva York. Y es en uno de estos donde se originó el SARS en 2003 y donde se sospecha brotó el COVID-19 que tiene en incertidumbre a todo el mundo.
En México son en los rastros clandestinos de la capital, Estado de México y otras entidades donde incluso menores de edad matan animales en patios o bodegas con crueldad y sin ninguna medida de higiene ni controles sanitarios para después venderlos al público, lo que los convierte en una amenaza para la salud de los mexicanos y viola la NOM-194, y NOM-033, ha documentado Igualdad Animal México.
Cada año, solo en la capital del país son asesinados 144 millones de animales en rastros clandestinos, como cerdos bebés enumerados en las orejas o borregos para barbacoas. En un video de la organización internacional, se ve a un borrego revolcándose en el piso amarrado de las patas con una cuerda ensangrentada a lado de una cazuela desbordando su sangre.
También existe la práctica del “pollo recién matado” en tianguis y mercados, los cuales de la jaula pasan muertos a la bolsa del mandado, expuso en entrevista Dulce Ramírez, directora de Igualdad Animal México, quien mencionó que en el Mercado Sonora y Jamaica comercializan tanto animales silvestres como de abasto, por lo que “debemos instar a las autoridades mexicanas para que prohiban este tipo de lugares que tienen en confinamiento y enfermos a animales”.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) han informado que entre el 70 y 75 por ciento de las nuevas enfermedades humanas surgidas en los últimos 40 años tiene su origen en animales.
Con información de Sin Embargo.mx