La adopción de nuevas tecnologías es cada vez un tema más frecuente en cuanto a la organización en unos Juegos Olímpicos. Se tratan de aquellos cambios y mejoras en lo que respecta la experiencia olímpica tanto para atletas como para aficionados.

Se trata de hacer de los juegos, una fiesta más innovadora, interactiva e inmersiva para todos los actores.

El Comité Olímpico Internacional es un organismo que está comprometido con la innovación, y esto se nota en todos los niveles. En ocasiones pasadas rompió los protocolos del relevo de la antorcha como en Río 2016 cuando le ofreció a un jugador de póker de mucho renombre en Brasil, André Akkari, llevar la preciada flama olímpica.

Ahora, de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 se esperaba mucho ya que es un país sinónimo de avances tecnológicos y si bien la inauguración dio apenas unos destellos de lo que podía ser, los días de competición ya se ven mucho más vestidos de implementaciones tecnológicas.

Vehículos automatizados

Las distancias entre las diferentes sedes de los Juegos Olímpicos pueden llegar a ser muy grandes por lo que el comité organizador puso en marcha una flota de vehículos que se manejan solos para no solo llevar a los atletas desde el aeropuerto hasta la villa olímpica sino también para transportar al numeroso cuerpo de prensa que viene a cubrir el evento desde todas partes del mundo.

Una de las claves en cualquier Olimpiada es el de convertir el evento en un vector de desarrollo para la ciudad una vez terminé el evento, y es que esta flota de vehículos con pilotos automáticos está teniendo su prueba pilota en Tokio 2020 para luego ponerlos en uso en la capital de Japón para intentar rebajar los accidentes y el tráfico en las autopistas.

Robots asistentes

Y si hablamos de tecnología en Japón tenemos que hablar de robots.

Los robots desarrollados por Toyota sirven de guías para los atletas y staff de los Juegos Olímpicos. Son capaces de ayudar con direcciones, dar información acerca del evento e incluso hay un modelo capaz de llevar valijas u objetos pesados. Se pueden apreciar incluso durante ciertos eventos, robots que llevan el equipamiento deportivo de los atletas.

Energías renovables

Tokio 2020 es un evento comprometido con el medioambiente. Prueba de esto es el impresionante proyecto de energía que alimenta entre otras cosas las tecnologías de vehículos y robots que presentamos antes.

Este quizás sea el legado más grande que pueda dejar Tokio 2020, la energía a base de hidrógeno.

Se habla del hidrógeno como la energía del futuro ya que no produce emisiones de dióxido de carbono y se produce utilizando energías renovables como es el caso del hidrógeno de Tokio 2020 que proviene en gran parte de una central solar en Fukushima.

Basta con enterarse de que toda la energía de la Villa Olímpica se alimenta con hidrógeno: La luz, el aire acondicionado, el agua caliente e incluso las cafeterías y centros de entrenamiento provienen de energías verdes.

La televisión

Y finalmente, a nivel televisivo, el espectador está teniendo un abanico de nuevas ofertas para hacer de la experiencia olímpica un recuerdo grabado en la memoria de los aficionados que ven el evento a través las pantallas.

Desde sistemas suplementarios de cámaras para emitir replays desde ángulos nunca vistos hasta grafismos de datos biométricos de los deportistas. Hablamos de cámaras colocadas a 12 metros de los atletas y que se concentran en analizar el más mínimo cambio en el color de piel de los deportistas que señale la contracción de los vasos sanguíneos.

En disciplinas como el tiro con arco, el televidente puede sentir el latido y las variaciones en pulsación de los atletas a través esta información que aparece en pantalla.

Y un popular entre los amantes al deporte es la vista 360 de las acciones. En la arena de Saitama, se instalaron hasta 35 cámaras 4k que permiten realizar tomas en 360 grados de todos los lugares del campo con una precisión espectacular.

Estamos viviendo una auténtica revolución tecnológica en Tokio 2020.