Redacción
El ex presidente Felipe Calderón
ya tiene nueva chamba, y no es México Libre; se trata de un puesto como
consejero independiente de la empresa Avangrid, que es filial de la
multinacional energética Iberdrola.
El detalle es que la empresa
española Iberdrola es una de las que más se benefició durante el sexenio del
panista con la privatización de la electricidad en México.
Aunque se deja en claro que “las
operaciones de Avangrid se circunscriben al mercado americano de energía y no
tiene ni ha tenido ninguna participación en México”, la compañía pertenece en
un 81.5 por ciento a Iberdrola, la empresa española que durante el sexenio de
Felipe Calderón se convirtió en la principal generadora de energía eléctrica
privada en México gracias a una jugada maestra que contó con la complacencia de
Los Pinos.
La multinacional aumentó
considerablemente sus ganancias al desplazar a la Comisión Federal de
Electricidad (CFE) en la venta de energía eléctrica a las grandes empresas,
después de que el gobierno calderonista le permitió modificar sus permisos
originales para transformarse de productor independiente en auto abastecedor,
de acuerdo con una nota publicada por el periodista Israel Rodríguez en el
diario La Jornada.
El contrato original establecía
que Iberdrola estaba obligada a suministrar energía durante 25 años
exclusivamente a la CFE, pero el cambio le concedió la posibilidad de aumentar
su capacidad en la generación de energía y convertirse en proveedor de
electricidad de grandes empresas como Cervecería Moctezuma, Cuauhtémoc,
Chedraui, Sigma Alimentos, Soriana, Kimberly Clark (de Claudio X. González) y
Nissan, dejando que la CFE se encargara únicamente de otorgarle el servicio a
los pequeños consumidores.
La multinacional española
aprovecha también la red eléctrica con millones de postes, transformadores de
distribución y miles de kilómetros de líneas, construidas durante más de 70
años por la CFE y la extinta Luz y Fuerza del Centro, lo que le permite llegar
a cualquier lugar del país, pagando un costo de porteo que no llega ni a los 20
centavos por kilovatio-hora.
Por si fuera poco, Iberdrola se
ha visto favorecida con la obtención de contratos millonarios por parte de la
CFE. En 2012, recibió 43 mil 422 millones 854 mil 800 pesos, según lo reveló la
Auditoría Superior de la Federación (ASF).
En 2014, obtuvo mil millones de
euros derivados de los contratos para construir infraestructura y en 2016 ganó
una licitación por 400 millones de dólares para construir la central de ciclo
combinado del Noroeste, en Sinaloa, según el diario El País.
En 2010, durante la visita de
Felipe Calderón a España, el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, le
agradeció sus esfuerzos por los cambios en la regulación y le pidió que
resolviera los “pequeños escollos” para seguir construyendo parques eólicos en
Oaxaca, pese a la oposición de los habitantes. Seis años después lo premia
otorgándole un empleo dentro de una de sus filiales en el mundo.
Puede trabajar, la ley lo ampara
Calderón aceptó la invitación
para incorporarse a esta empresa con sede en Estados Unidos, tres años y medio
después de haber sido presidente de México, por lo que según su oficina de
prensa, no tiene ningún impedimento de trabajar.
“La Ley Federal de Responsabilidades
de los Servidores Públicos establece en su artículo 47 fracción XV que los
servidores públicos deben abstenerse de aceptar algún empleo, cargo o comisión
hasta un año después de haber dejado el cargo” se lee en el comunicado emitido
por la oficina de prensa de Calderón.
Con información de Polemón.mx