Cuatro integrantes de una familia murieron ayer en la madrugada en un choque automovilístico en la carretera Culiacán-Eldorado, en la zona conocida como El Trébol, de Costa Rica presuntamente ocurrido por exceso de velocidad.
En el lugar fueron identificados mamá y papá con los nombres de Fernando N., de 37 años, y Amada Sofía, de 21 años de edad; mientras que la niña de 2 años respondía al nombre de Fernanda N., además de una bebé de apenas un mes de nacida.
Un menor de aproximadamente cinco años integrante de la familia quedó herido y fue llevado a un hospital.
De acuerdo con las autoridades, se dijo que presuntamente el padre de familia circulaba a exceso de velocidad cuando se dio el lamentable percance.
Eran alrededor de las 05:20 horas cuando se les daba aviso a los operadores del 911 de que en la carretera una familia había tenido un fuerte accidente y se necesitaba la pronta ayuda para ellos. Tras el llamado acudieron paramédicos de Cruz Roja y agentes policiales y de Tránsito municipal.
Cuando llegó el personal médico de rescate, rápidamente se acercaron al carro que quedó destrozado, y con solo mirar se dieron cuenta de que solo un menor estaba vivo, y de inmediato le aplicaron los primeros auxilios y posteriormente lo trasladaron estable a un hospital para que fuera revisado debidamente, pues a pesar de que visiblemente se encontraba bien, se tenían que descartar posibles golpes internos.
Según la información que se recopiló en el sitio de la múltiple tragedia, la familia viajaba a bordo de un vehículo Nissan Sentra de modelo reciente en dirección de sur a norte por la carretera Culiacán-Eldorado, presumiblemente después de haber asistido a una fiesta en la comunidad de La Chía, y al llegar al puente de El Trébol, de Costa Rica, el conductor por motivos que se desconocieron pegó de frente contra el muro de concreto que divide ambos carriles.
Tras el golpe, los tripulantes dieron vueltas dentro de la unidad, que casi se parte en dos. Posteriormente llegaría la ayuda y confirmaría las muertes de las dos niñas y de la pareja.
Cuando los rescatistas realizaban las atenciones, los agentes de Tránsito Municipal asignados al municipio de Costa Rica implementaron un cerco de seguridad vial, ya que la unidad siniestrada quedó en el carril de norte a sur, dirección contraria en la que circulaba, y ante el peligro inminente de que pudiese presentarse otro accidente durante los protocolos, se optó por cerrar ambos carriles a la circulación, y los usuarios de la carretera tuvieron que desviarse a la caseta inoperante de la autopista Benito Juárez.
Cuando el personal forense de la Fiscalía llegó, el área estaba marcada y era señalada con conos de precaución y pidieron toda la información de los sucedido para iniciar las diligencias.
Los peritos hicieron la marcación del posible trayecto del carro y posteriormente sacaron los cadáveres del interior para ponerlos en el asfalto a un costado del vehículo, donde los pequeños cuerpos de los menores estuvieron a un lado de los de sus padres, mientras los especialistas hacían los trabajos de campo.
Por último, y ya acabado el peritaje, los cuatro cuerpos fueron llevados al Servicio Forense de Culiacán, donde después de una hora familiares fueron a reclamarlos.
Con información de Debate, Twitter.
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— Revista TMX (@RevistaTMX) October 27, 2019