Redacción
La ley la abandonó y ahora está muerta. El Tribunal de Justicia de Ciudad de México pudo evitar una muerte más, pero simplemente no lo hizo, pues no notificó a la Procuraduría de Justicia capitalina de la liberación del hombre acusado de golpear e, incluso, intentar asesinar a su ex esposa, Abril Pérez Sagaón.
La procuraduría pudo haberle brindado protección, pero no fueron notificados y ahora la mujer y madre de familia fue asesinada el lunes pasado; el ex esposo, Juan Carlos García, había sido acusado de intento de feminicidio y quedó en libertad por órdenes del juez capitalino, Federico Mosco.
Hoy, a través de redes sociales se difundieron las fotos de Abril después de recibir la brutal golpiza por su ex marido y donde se denunció por intento de feminicio, pues la golpeó con un bat en la cabeza mientras dormía.
Por ello se giró una orden de aprehensión contra el agresor por el delito de tentativa de homicidio. El 20 de septiembre, Juan Carlos fue vinculado a proceso por el delito de feminicidio en grado de tentativa, por lo que fue remitido al Reclusorio Oriente.
Sin embargo, el avance del caso se vio truncado luego de que el juez a cargo del caso, Federico Mosco González, reclasificara el caso como violencia familiar y lesiones, pese a las pruebas que evidenciaban la gravedad de las heridas que Abril sufrió a manos del acusado.
Tampoco bastaron los testimonios de la propia víctima y el hijo que presenció el ataque para el juez considerara que el hombre había actuado deliberadamente. Argumentó que "en su actuar no había intención o dolo, sino más bien se trataba de un evento de violencia familiar".
El 8 de noviembre, los abogados de García presentaron una apelación contra la prisión preventiva, la cual fue concedida por el magistrado Héctor Jiménez López. Gracias a eso, el agresor fue puesto en libertad.
Dos semanas después, el 25 de noviembre (Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, en una triste ironía), Abril fue asesinada.
Con información de Debate.com