El ex Secretario Salvador Cienfuegos fue detenido en Los Ángeles por cargos muy fuertes de narcotráfico y lavado de dinero, de acuerdo con AP (The Associated Press -Prensa Asociada-).
Dos personas con conocimiento del arresto dijeron que Cienfuegos fue detenido por una orden de la Administración de Control de Drogas de EU (DEA).
Una de las personas dijo que la orden era por tráfico de drogas y lavado de dinero. Ambos hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados a discutir el caso públicamente.
Fuentes también dijeron al diario The Washington Post que Cienfuegos fue detenido por cargos de narcotráfico.
Mike Vigil, ex jefe de operaciones internacionales de la DEA, dijo a la AP que cuando estuvo en México en 2012 escuchó de algunas versiones que ligaban a Cienfuegos con corrupción, aunque nada que se pudiera probar.
“Eso fue algo inaudito porque México siempre ha puesto a los militares en un pedestal ”, dijo Vigil.
“La corrupción está llegando a su apogeo, porque las personas que alguna vez fueron intocables ahora están siendo arrestadas”, añadió.
Cienfuegos es el primer oficial militar de alto rango en ser detenido en Estados Unidos en relación con un caso de corrupción relacionada al narcotráfico, de acuerdo con The New York Times.
Bajo el mando del general Cienfuegos, el ejército mexicano fue acusado de abusos de los derechos humanos. El peor escándalo durante su etapa al frente del departamento fue la masacre de presuntos criminales en una bodega en 2014.
En junio de ese año, soldados asesinaron a 22 supuestos criminales en la comunidad de Tlatlaya. Aunque algunos murieron en un primer tiroteo con una patrulla militar, en el cual resultó herido un soldado, una investigación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos concluyó que al menos ocho, aunque quizás fuesen hasta 12 de los sospechosos, fueron ejecutados cuando ya se habían rendido.
Aunque el actual presidente, Andrés Manuel López Obrador, ha prometido combatir la corrupción y cualquier irregularidad, el mandatario se ha apoyado en gran medida en las fuerzas armadas para distintas tareas, incluido el combate al crimen organizado.
Pero a diferencia de otros gobiernos, López Obrador le ha encargado otras tareas al ejército, desde la construcción de infraestructuras a la distribución de suministros médicos.