De acuerdo con el periodista Juan Veledíaz, una colaboración del exsecretario de la Defensa Nacional con la fiscalía neoyorkina era visto como algo improbable pero no imposible.
Esta semana se dio a conocer que el general Salvador Cienfuegos Zepeda se encuentra negociando declararse culpable de los cargos que se le imputan para evitar ir a juicio y obtener una disminución en su condena.
Una carta firmada por Edward V. Sapone, abogado de Cienfuegos, y el fiscal Ryan C. Harris, enviada al juez Steven M. Gold de la Corte de Distrito Este de Nueva York, señala que las partes se encuentran negociando “una declaración de culpabilidad”.
En dicho documento, publicado en México por el sitio informeconfidencial.mx, se encuentra establecido un plazo del 5 al 18 de noviembre para comunicarle al juez el resultado de dicha negociación.
En su columna, Fuera de Agenda, Veledíaz explica que esa colaboración parecía improbable porque no podría inculpar a nadie que no fuera su único superior, el expresidente Enrique Peña Nieto; pero no era imposible porque podría negociar un “trato especial” a cambio de información confidencial y secreta a la que tuvo acceso como secretario de la Defensa.
Además señala que, según los manuales militares, la información confidencial es aquella cuya divulgación generaría daños a personas o entes públicos y privados. Por otro lado, la información secreta es aquella cuya difusión provocaría daños a la seguridad interior y seguridad nacional.
El también director regional de la Organización Editorial Mexicana (OEM) en Sinaloa explica que en diciembre del 2012 cuando el general Cienfuegos asumió el cargo de secretario de la Defensa Nacional, recibió por procedimiento, información confidencial y secreta de los llamados “campos de poder” que van de lo económico, político, social y militar. “Su conocimiento de información de seguridad interior y seguridad nacional, reservada únicamente al presidente y a él mismo, lo convirtió en el funcionario más importante del gabinete solo por debajo del jefe del Ejecutivo”.
Entre esas informaciones se encuentran, por ejemplo, la ubicación de los grandes capos a los que se les daba seguimiento y la actividad de políticos de alto nivel implicados en narcotráfico. La difusión de esas informaciones podría “causar una crisis política, económica o social, que afectaría al gobierno y al partido en el poder”, asegura Veledíaz.
El general Cienfuegos Zepeda “posee información confidencial y secreta. Compartir esa información ante la fiscalía de Nueva York –como parte de la negociación del caso y su posible revelación, podría provocar una crisis de seguridad nacional y agudizaría la crisis en la seguridad interior”, concluye.
México debió ser advertido del arresto de Cienfuegos: SRE
El secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard Casaubon, habló el pasado 15 de octubre con el fiscal general de Estados Unidos, William Barr, sobre la detención del extitular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el general Salvador Cienfuegos Zepeda.
Fuentes federales confirmaron a EL UNIVERSAL que la conversación ocurrió la semana pasada y que durante el acercamiento, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) observó que México debía ser advertido previo al arresto e investigación de Cienfuegos Zepeda.
El general Cienfuegos Zepeda es acusado por la Corte Federal de Brooklyn, Nueva York, de tener vínculos con el narcotráfico y por presuntamente blanquear fondos de la delincuencia organizada.
La semana pasada tuvo su primera audiencia ante la Corte Federal de Brooklyn, Nueva York, que ordenó detenerlo y se declaró no culpable de los cuatro cargos que le fueron leídos.
Su proceso inicia formalmente el 18 de noviembre próximo, en tanto permanecerá en un Centro de Detención de Nueva York, pues la fiscalía se opuso a que le permitieran salir bajo fianza por el riesgo de que pueda fugarse.
El pasado 29 de octubre, el canciller Ebrard Casaubon afirmó que el gobierno de México expresó su descontento con Estados Unidos por mantener en reserva la investigación contra el exsecretario de la Defensa Nacional, general Cienfuegos Zepeda y por no avisar sobre las intenciones de detenerlo.
Las fuentes consultadas no precisaron si la conversación entre Ebrard Casaubon y Barr llegó a buen término.
Estados Unidos acusó al extitular de la Sedena de utilizar su posición en el gabinete del expresidente de México, Enrique Peña Nieto, para ayudar al Cártel del H2 a expandir su territorio.
Este cártel fue creado por Juan Francisco Patrón Sánchez El H2, derivado de lo que quedó de la organización de los hermanos Beltrán Leyva y operaba principalmente en el estado de Nayarit y colaboraba con Los Mazatlecos, grupo controlado por Isidro Meza Flores, mejor conocido como El Chapo Isidro.
Según la investigación que el gobierno mexicano afirmó que desconocía hasta el día de la detención del general Cienfuegos Zepeda, el Cártel del H2 se dedicaba primordialmente al tráfico de cocaína, y producía y traficaba metanfetaminas, marihuana y heroína.
Con la ayuda de Cienfuegos Zepeda, según autoridades de Estados Unidos, la organización logró tener numerosas células de distribución en Estados Unidos, las cuales operaron en ciudades como Los Ángeles, California; Las Vegas, Nevada, y en estados como Ohio, Minnesota, Carolina del Norte y Nueva York.
Las pruebas obtenidas contra Cienfuegos Zepeda derivaron de la intervención de cientos de comunicaciones de un teléfono Blackberry en las que se reveló que el exmando militar recibía pagos para apoyar al cártel de diferentes modos, como asegurarse que los operativos militares no fueran contra El H2, así como realizar operativos contra las organizaciones rivales, entre otros.
Con información de Cuidad Virtual.