Redacción
La Unidad de Inteligencia Financiera
(UIF) los tiene en la mira. Uno de los socios del gobernador de Tamaulipas,
Francisco Javier García Cabeza de Vaca, está en la lista Cisen y Fincen por
actividades “sospechosas de lavado de dinero”. Se trata de Baltazar Higinio
Reséndez Cantú, quien de acuerdo a la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF),
el monto por el que es vigilado asciende a 4 mil 315 mil 800 dólares.
La revista Proceso presentó
este domingo un reportaje en que enumera todas las actividades en las que
Resédez Cantú realizó operaciones inusuales en efectivo. Entre 2002 y 2018
repartidas en siete depósitos por 6 millones 973 mil 441.38 pesos, y otros 23
envíos por 2 millones 144 mil 720 dólares; así como 23 operaciones de retiro
por un monto de 718 mil 987.80 dólares y otras 17 operaciones por 21 millones
309 mil 42 pesos, sin embargo “la
operación más relevante se realizó el 30 de abril de 2018, cuando dispuso de 15
millones 53 mil 500 pesos de una sucursal ubicada en el municipio de Reynosa”.
Otro de los socios del
gobernador es Juan Francisco Tamez
Arellano, quien depositó en 2019 vía su empresa T Seis Doce, SA de CV, 33
millones 400 mil pesos a Cabeza de Vaca, repartidos en cuatro SPEI, pero
también le giró un cheque en diciembre de ese mismo año por 5 millones 252 mil
231 pesos, “desconociéndose el motivo de esas transacciones financieras”,
apunta la UIF.
De acuerdo con Proceso, la UIF
considera “relevante” que Tamez Arellano reciba recursos de Baltazar Higinio
Reséndez por 33.5 millones de pesos.
Proceso menciona que en cuanto
a las empresas denunciadas por la UIF, a la Productora Rural y Agropecuaria
Regional Cava, SPR de RL, se le detectaron facturas que “opera con personas
físicas y morales destacadas por diversas irregularidades, que van desde el
rápido movimiento de fondos, recibir recursos de una casa de bolsa para
expedirlos a personas físicas sin actividad económica relacionada y retirarlos
en efectivo”, entre otras modalidades.
Detalla que a través de SPEI
se conoce que esta empresa recibió entre abril de 2014 y noviembre de 2019 más
de 99 millones de pesos, “lo que llama sobremanera la atención, al tratarse de
una sociedad de producción rural”.
La UIF destaca una factura
enviada a Bluelimit Comercial, SA de CV, por 12.8 millones de pesos, una
empresa que se dedica a la la
compraventa de acero, pero que no cuenta con maquinaria y sólo tiene un
trabajador que se dedica a contestar llamadas.
En cuanto a operaciones
notariales, la UIF localizó que de septiembre de 2017 a junio de 2018 registró
ocho movimientos por adquisición de inmuebles por 63 millones 479 mil 299
pesos, siendo que en sus declaraciones anuales manifestó ingresos en el periodo
2015-2019 por 42.1 millones de pesos.
De acuerdo con la UIF, la
anterior transacción “aparenta incongruencia entre lo que gasta y declara ante
la autoridad fiscal, lo que sin duda es un dato más que nos permite presumir la
participación en el delito de recursos de procedencia ilícita”.
Respecto a otra empresa
denunciada, Inmobiliaria RC de Tamaulipas, SA de CV, la UIF considera como
“primer dato relevante” que sus accionistas sean Baltazar Higinio Reséndez
Cantú y su esposa Nancy Carolina Treviño Vega, aunque el administrador único es
Reséndez Cantú.
El semanario precisa que el
domicilio fiscal y/o teléfono de Inmobiliaria RC de Tamaulipas coincide con
otras tres compañías controladas por su esposa y otras cinco de las que no se
identifica la relación que tiene con sus propietarios. Esta empresa, de acuerdo
con la UIF, registró retiros en efectivo por 14 millones 76 mil 373 pesos. Las
operaciones se realizaron de forma estructurada, destacando 10 operaciones por
200 mil pesos, cuatro por 250 mil y otras cuatro por 300 mil pesos.
La UIF señala que el manejo de
efectivo “es susceptible en la participación de posibles hechos calificados por
la ley como delito de recursos de procedencia ilícita”.
Con información de Polemón