Gibran Ramírez, el terror de los malquerientes de la “cuatroté” porque una y otra vez los deja sin argumentos y en ridículo, le dio con todo al “periodista” Leo Zuckermann durante un segmento del programa La Hora de Opinar en donde expuso una defensa de los cuestionamientos “Jóvenes Construyendo Futuro” del gobierno de AMLO. 

En un mensaje en su cuenta de Twitter, Ramírez Reyes compartió un video del momento en que explica a Zuckermann y el resto de los panelistas, entre los que se encuentra Carlos Bravo Regidor, que los señalamientos de un reportaje en contra de "Jóvenes Construyendo el Futuro" carecen de argumentos periodísticos y de investigación.

En su exposición, el también columnista de Milenio y profesor de la UNAM, lamenta que los responsables de la pieza periodística no hayan buscado la versión del gobierno federal en torno a las supuestas irregularidades en el programa antes de publicar la historia. 

Para empezar, el analista afín a la "Cuarta Transformación" destaca que las críticas al programa se basan en criterios sobre datos de la economía formal, cuando el 50 por ciento de la economía mexicana es informal y resulta evidente que muchos de los datos sobre las unidades de empleo donde se asignaron a becarios, no aparecen en plataformas como Google Maps o Uber. 

Gibrán Ramírez destacó que la norma establecida no permite proporcionar datos sobre los domicilios o constituciones de los centros productivos, por lo que dicha información no podía consultarse de manera externa, sino conforme a una solicitud de información ante la dependencia correspondiente, en este caso la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS).

La verdad es que el reportaje que critica sin fundamento al programa de apoyo a jóvenes es un conjunto de medias verdades organizadas a propósito por sus autores para hacer parecer un desastre a esta iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador. 

Sin embargo, ya sabemos que la oposición aguada y los periodistas chayoteros así van a actuar contra el Gobierno de la “cuatroté”, anclados en medias verdades o, de plano, difundiendo Fake News con la finalidad de hacer una piscacha política en favor de su causa.