El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, tiene muy claras sus prioridades en este momento, encontrar de entre todas las alternativas que existen en el mundo y lo más pronto posible, un antídoto o una vacuna para el covid-19 y ponerlo a disposición de las y los mexicanos.
Esa parece ser la encomienda que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha dado a su canciller. Una misión compleja, sin duda.
El canciller anunció ayer que México se incorpora al protocolo clínico fase 3 de prueba para la vacuna contra el coronavirus de la firma francesa Sanofi-Pasteur, el cual se aplicará, a nivel global, a 35 mil voluntarios, mayores de 18 años.
Ebrard explicó que esta adhesión no tendría costo para el país y por el contrario nos permitiría el acceso prioritario a la compra de la vacuna, una vez que su efectividad haya sido comprobada. “La incorporación de nuestro país al primer protocolo fase tres para la vacuna contra Covid-19… va a ser una gran noticia, una buena noticias para nosotros”, explicó el canciller.
Marcelo Ebrard dijo que nuestro sistema de salud ha tenido una buena experiencia de colaboración con Sanofi, y destacó que la participación de esta empresa fue decisiva en el 2009 para el desarrollo de la vacuna de la influenza.
Ebrard reiteró que nuestro país busca participar en los protocolos fase 3 de desarrollo de vacunas con varios países, entre ellos Estados Unidos, China y Alemania, así como los que encabezan las empresas AstraZeneca y Pfizer.