Ramón Martín Espinosa Solís, ingeniero mecánico eléctrico egresado de la Universidad de Guadalajara (UdG), desarrolló un material para construir casas amigables con el ambiente y resistente a movimientos sísmicos.
Este material no requiere de mantenimiento, aire acondicionado o calefacción para ofrecer una buena calidad de vida a sus habitantes y es más resistente a movimientos sísmicos, debido a que es flexible.
"En esta casa no hay aire acondicionado, y la diferencia de la temperatura con el exterior es de alrededor de seis grados centígrados. Esto se debe a los materiales aislantes que provocan una transmisión de calor lenta.
"Además, el diseño arquitectónico bioclimático permite una ventilación cruzada, por lo que es erradicado el calor que logra transmitir el material desde el exterior hacia el interior”, describió el ingeniero.