Dos físicos teóricos especializados en sistemas complejos vaticinan que la deforestación global causada por el hombre acabará desencadenando el “colapso irreversible de la civilización humana” en las próximas dos a cuatro décadas.

“Si continuamos destruyendo y degradando los bosques del mundo, la Tierra ya no podrá sostener una gran población humana”, dice el estudio, revisado por pares y publicado en Nature Scientific Reports.

“Entre 2000 y 2012, se talaron 2,3 millones de kilómetros cuadrados de bosques en todo el mundo. A este ritmo, todos los bosques desaparecerían en aproximadamente 100-200 años. Claramente, no es realista imaginar que la sociedad humana comenzará a verse afectada por la deforestación solo cuando se tale el último árbol. La degradación progresiva del medio ambiente debido a la deforestación afectaría en gran medida a la sociedad humana y, en consecuencia, el colapso humano comenzaría mucho antes”.

El artículo está firmado por Gerardo Aquino, un investigador del Instituto Alan Turing de Londres que trabaja en modelos de sistemas complejos políticos, económicos y culturales para predecir conflictos, y Mauro Bologna, profesor del Departamento de Ingeniería Electrónica de la Universidad de Tarapacá, en Chile.

La pareja de científicos argumenta que la tala indiscriminada de los bosques pone en peligro nuestros sistemas planetarios de soporte vital, entre ellos el almacenamiento de carbono, la producción de oxígeno, la conservación del suelo, la regulación del ciclo del agua y el soporte de sistemas de alimentación humana, así como el hábitat de innumerables especies.

Los investigadores modelaron las tasas actuales de crecimiento de la población y de la deforestación en representación del consumo de recursos para calcular la probabilidad de que la civilización evite un colapso catastrófico. El resultado:

Los cálculos muestran que, manteniendo la tasa real de crecimiento de la población y el consumo de recursos, en particular el consumo forestal, nos quedan algunas décadas antes de un colapso irreversible de nuestra civilización. En conclusión, nuestro modelo muestra que un colapso catastrófico en la población humana debido al consumo de recursos es el escenario más probable de la evolución dinámica basada en los parámetros actuales. Concluimos desde un punto de vista estadístico que la probabilidad de que nuestra civilización sobreviva en sí misma es inferior al 10% en el escenario más optimista. Los cálculos muestran que, manteniendo la tasa real de crecimiento de la población y el consumo de recursos, en particular el consumo forestal, nos quedan algunas décadas antes de un colapso irreversible de nuestra civilización.

No es la primera vez que alguien predice el fin del mundo civilizado, pero que una predicción de este tipo se publique en una revista seria resulta llamativo.

Los investigadores no solo extrapolan el problema de la deforestación para vaticinar un punto de no retorno que llevará a un “colapso desastroso en la población antes de llegar a un estado estable de baja población o extinción total”, sino que proponen construir una esfera de Dyson (una megaestructura hipotética que rodee el sol para absorber su energía) como solución.

“La esfera de Dyson no tiene que tomarse literalmente, sino más bien como un valor energético”, dijo Aquinos a Motherboard. “La energía podría producirse de cualquier otra manera, como por ejemplo a través de la fusión nuclear”.

¿Realmente estamos tan mal? Bueno, no soy físico teórico, pero la tasa de deforestación mundial se ha reducido un 40% en la última década y los modelos ya predecían que la población global iba a menguar a partir de 2050-2060.

Por otro lado, la investigación solo tiene en cuenta la tasa de deforestación (con un valor obsoleto) y no modela el desarrollo tecnológico ni la lucha contra el cambio climático, que podrían alterar los resultados. No nos vamos a quedar con los brazos cruzados para siempre, ¿no? Saldremos de dudas en unos años.