El hijo del ex Presidente Carlos Salinas de Gortari, Emiliano Salinas Occelli, era quien otorgaba legitimidad a la secta NXIUM, de acuerdo con el testimonio de una mujer en el juicio que se lleva a cabo en Nueva York, contra su líder y fundador, Keith Raniere.
“En verdad confiaba en los consejos de Emiliano. Venía de una familia muy respetable, bien educada. Éramos buenos amigos”, señaló la testigo, Nicole “N”, originaria de California, Estados Unidos.
Nicole explicó que que su relación con Salinas Occelli se estrechó durante un retiro vinculado al culto en agosto de 2015. Dijo que durante una charla con él, le había comunicado su preocupación sobre la manera en que se idolatraba a Raniere.
“Keith no quiere eso. La gente proyecta sus ideas en él. La gente quiere creer en algo más. Eso sucede. No hay necesidad de preocuparse”, le respondió él para tranquilizarla.
Cuando se le preguntó sobre el impacto que tuvo en ella el consejo de Salinas, ella dijo haberse sentido tranquila, ya que ambos eran “buenos amigos” y que Emiliano no parecía idolatrar al líder de la secta.
Mencionó que antes había tomado un curso relacionado con la secta, en el que notó que los miembros mostraban reverencia a los instructores. Durante las cinco semanas que duró, los instructores insistían en que los asistentes fueran discretos sobre lo aprendido en las sesiones.
Luego, explicó que la actriz Allison Mack, cómplice de Raniere, la persuadió para unirse a un “grupo secreto” dentro de NXIVM llamado DOS, donde las participantes eran esclavas sexuales del líder.