Uno de los sueños más temidos es tener un encuentro con la Muerte, pues suele generar en la persona un sentimiento de preocupación por sí mismo o los seres queridos, ya que se suele creer que pueden ser fatales advertencias del más allá.
No obstante, personas afines al mundo de lo esotérico se han dado a la tarea de consultar, por medio de sus artes, el posible significado de estos sueños.
En esta ocasión, la astróloga cubana Mhoni Vidente hizo acto de presencia para explicar a detalle las razones de aquellos angustiantes episodios nocturnos.
La adivina aseguró que, cuando se sueña la Muerte en alguna forma, no se está advirtiendo sobre la muerte de alguien, sino que es una manera de anunciar que vienen importantes cambios en nuestra vida.
La Muerte simbolizaría en este tipo de sueños que hay algo que se termina o muere, para dar paso a otra cosa. Si se sueña de manera recurrente, señaló Mhoni Vidente, puede coincidir con rupturas de nuestra vida, que pueden tener relación con el amor, trabajo, etcétera.
Algunas de las situaciones en las que podemos soñar con la Muerte podría ser cuando sentimos insatisfacción con nuestro trabajo, cuando ya no somos felices con nuestra pareja o cuando estamos hartos de una vida monótona o triste.
En cualquiera de estos casos, soñar con la muerte o el fallecimiento de alguien podría indicarnos que, en nuestro interior, sabemos que llegó la hora de darle fin a dichas situaciones, y nuestro trabajo consistiría entonces en reflexionar qué ámbito de nuestra vida nos dejó de aportar algo.
Según detalló el portal soy Carmín, soñar con la Muerte también puede ser una vía de escape en épocas de cansancio o estrés excesivo. Dicha situación podría generar un sentimiento de frustración, que sale durante las noches por la necesidad de detener el tiempo y descansar.
En cambio, si se sueña que alguien en específico muere, podría ser una señal de que, en nuestra percepción, dicha persona necesita ponerle fin a algo o tener un cambio importante. Asimismo, podría indicar que ya dejó de ser lo que era para nosotros: amigo, pareja, amante, etcétera.