Luego de realizar estudios in vitro e in vivo en un modelo animal, la investigadora del Instituto Politécnico Nacional (IPN), Lesslie Espinosa Espinosa, comprobó que además de tener actividad antibacteriana, antioxidante y antifúngica, la cáscara de mango de la variedad Ataulfo contiene compuestos que poseen propiedades cicatrizantes.
Para esta investigación, la joven estudiante de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB) fue asesorada por los investigadores Leticia Garduño Siciliano, de la ENCB, y Marco Aurelio Rodríguez Monroy, de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Iztacala, de la Universidad Nacional Autónoma de México, informó el sitio Excélsior.
Para poder obtener los compuestos fenólicos contenidos en la cáscara del fruto, la sometieron a un proceso de maceración con un solvente de polaridad alta y luego, tras varios procesos de filtración, obtuvieron el extracto crudo.
Posteriormente, el extracto obtenido fue evaluado in vitro y probaron su actividad antimicrobiana, antifúngica y antioxidante.
“Estas propiedades son muy importantes, ya que al proceso de cicatrización pueden afectarlo diferentes factores, como alguna infección bacteriana, por ello a partir de corroborar que el extracto tiene efecto antimicrobiano decidimos probarlo en un modelo murino (ratones cepa CD1)”, explicó Espinosa.
#ComunicadoIPN ????? Comprueba IPN propiedades cicatrizantes de la cáscara de mango
— IPN (@IPN_MX) June 8, 2020
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Durante el proyecto, la investigadora realizó pruebas en roedores a quienes se les provocó una herida quirúrgica y le aplicaron el extracto obtenido disuelto en gel al 10 por ciento durante 14 días.
“En el modelo animal comprobamos a nivel macroscópico que a partir del día 8 o 9 la herida ya estaba cerrada, pero al realizar el estudio histológico determinamos que las dos capas estaban completamente cerradas en el día 11, por lo que concluimos que el extracto coadyuva a la cicatrización de piel en menor tiempo que el que lleva el proceso natural sin complicación de alguna infección”, detalló.
El siguiente paso en la investigación será establecer pruebas para determinar la toxicidad del extracto y continuar con estudios a niveles preclínicos con el propósito de conocer su seguridad. “Después de obtener esta información se realizarán pruebas clínicas (en pacientes) para un posible tratamiento”, agregó.
Cabe señalar que el extracto obtenido no mostró ningún efecto adverso en la prueba de toxicidad aguda implementada en el modelo animal (Ratas Wistar), por lo cual los investigadores tienen la posibilidad de seguir realizando estudios que repercutan en el cuidado de la salud de la población.
Con información de Mientras Tanto En México.