El racismo es una enfermedad que se creía desterrada de las sociedades democráticas del siglo XXI, pero estabamos equivocados. Donald Trump, Jean Marie Le Pen y Jair Bolsonaro nos han demostrado que los dicursos sustentandos en el odio racial y étnico aún generan simpatías y tienen un mercado electoral garantizado.
En México, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, ha puesto cartas en el asunto y se ha empeñado en señalar no solo los discursos sino las comunidades estadounidenses donde existen actitudes claramente xenofóbas.
La Cancillería ha identificado al menos 50 ciudades donde existen actitudes y conductas contra mexicanos y latinoamericanos. "Tenemos un mapa sobre organizaciones o personas. Hay más de 50 ciudades. Estamos en contacto con las comunidades y estamos tomando una serie de providencias para protegerlos de la mejor manera", dijo Ebrard.
La investigación para identificar la xenofobia, fue realizada por la cancillería de México después del tiroteo de El Paso, el pasado 3 de agosto, donde un ciudadano identificado como Patrick Crusius asesinó a 22 personas tras manifestar ideas racistas en contra de la población mexicana. "Consideramos que el supremacismo blanco es el principal peligro hoy en día. Y, por tanto, nuestra política exterior tiene un papel muy relevante en hacerle frente", aseveró el canciller.
Marcelo Ebrard señaló que la SRE sigue muy de cerca el proceso legal contra Crusius. En este sentido, afirmó que México solicitará su extradición si el Gobierno de Estados Unidos no imputa al agresor cargos por terrorismo.
Las declaraciones de Ebrard se produjeron tras otro tiroteo masivo ocurrido el pasado sábado en las ciudades de Odessa y Midland, también en Texas, en el que fallecieron siete personas y 22 resultaron heridas.
Con información de ZMG Noticias.