El acercamiento de los dos lugartenientes más cercanos de “La Barbie” con las agencias estadounidenses ha resultado clave en el caso contra el exfuncionario calderonista. Se trata de Miguel “N” (de Matamoros) y Natalia “C” (de Guadalajara), los cuales están colaborando con el FBI y la DEA.

 Luego de revelarse que Edgar Valdez Villarreal, alias “La Barbie”, fue informante de la DEA y el FBI desde 2008, y conforme avanza el caso del exsecretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, en una corte de Nueva York, las investigaciones del gobierno estadounidense van arrinconando cada vez más al expresidente Felipe Calderón.

García Luna, quien fuera la mano derecha de Calderón durante su llamada “guerra contra el narco”, es acusado de recibir sobornos del Cártel de Sinaloa y delitos de narcotráfico, lavado de dinero, entre otros. 

Cabe recordar que a principios de mayo pasado, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, hizo pública una nota diplomática que se entregó a la Embajada de EE.UU. en México, respecto al operativo “Rápido y Furioso”.

El documento plantea que, si como apunta la evidencia, el gobierno de Calderón conocía y autorizó el polémico operativo, se habrían presentado graves violaciones a la Constitución Mexicana por parte de quienes ocupaban los más altos cargos en el país.

Por otra parte, si resultase verdad que la administración calderonista no conocía ni autorizó el “Rápido y Furioso”, entonces las autoridades estadounidenses habrían actuado en territorio nacional sin conocimiento del gobierno, para entregar armas a la delincuencia organizada, violando la soberanía nacional de México.

Posteriormente, el 20 de mayo, Ebrard insistió en que aún no había respuesta de las autoridades del país vecino. “Las solicitudes de la Fiscalía General de la República (FGR) todavía no han recibido respuesta plena, o cabal para que pueda concluir sus indagatorias”, comentó.

Además, agregó que en ese contexto, la Fiscalía General alista diversos requerimientos que hará a EE.UU., para concluir las indagatorias que tiene abiertas.

De esta manera, dicho operativo se suma a las posibles denuncias que podría enfrentar García Luna, pero que también podrían alcanzar a su exjefe Calderón, quien se ha mostrado desesperado por conseguir un cargo público que le otorgue fuero. 

A finales de febrero del presente año, la organización impulsada por el expresidente y su esposa Margarita Zavala, México Libre, formalizó su solicitud ante el Instituto Nacional Electoral (INE) para convertirse en partido político y participar en las elecciones intermedias de junio 2021.

Mientras se han desatado los cuestionamientos de algunos sectores de la población sobre de dónde viene el financimiento de la organización y las acusaciones de sus posibles vínculos con el crimen organizado, el INE se encuentra revisando la documentación para avalar el registro de México Libre como partido. 

Sin embargo, la mira de las autoridades de EE.UU. se va cerrando y acercando cada vez más al exmandatario, para quien los comicios de 2021 podrían ser su última esperanza de burlar la justicia. 

Al parecer, se trata de una carrera contra el tiempo, en la que está latente la posibilidad de finalmente ver el nombre de Calderón entre los acusados, antes de dichas elecciones, pues como expresó José Luis Camacho Acevedo en su columna publicada en El Heraldo de México: “una bomba proveniente de Estados Unidos está a punto de estallarles a Felipe Calderón y su esposa Margarita Zavala, promotores del partido México Libre”.

Con información de Revolución Tres Punto Cero.