Perder a un familiar por una enfermedad es algo doloroso, pero perder dos en menos de una semana por Covid-19 es trágico. Así es la historia de Monete Hicks, quien vio morir a sus dos hijos a causa de COVID-19 en Lauderlake Lakes, ciudad del estado de Florida, en Estados Unidos.
La noche del 27 de junio, Hicks se dio cuenta de que su hijo Byron, de 20 años, tenía problemas para respirar mientras dormía, por lo que llamó a una ambulancia. A unas horas de haber llegado al hospital, Byron no pudo resistir al virus SARS-COV2 y murió a causa de un infarto, sin embargo, la tragedia para Monete apenas comenzaba.
A una semana de la muerte de Byeron, la hija de Monete, de nombre Mychaela fue hospitalizada tras presentar fiebre alta y constante dolor de cabeza.
“A medida de que pasaban los días, todo se descompuso en su cuerpo”, señaló la madre.
Monete contó en entrevista con NBC Miami, que su hija de 22 años perdió un riñón en la batalla contra la COVID-19, y falleció el 8 de julio.
Pese a que estaban jóvenes, el virus los atacó más fuerte debido a que ambos padecían obesidad y asma, además Mychaela tenía una enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
“Estoy tan acostumbrada a que estén aquí. He estado aguantando todo el día, pero durante la noche realmente me afecta”, añadió Monete.
Con información de Radio Fórmula