Loret de Mola, quien habría sido destacado por su labor periodistica, ahora es un reconocido opositor del actual gobierno y no pierde oportunidad para mostrar su desacuerdo con el mandatario.

Carlos Loret de Mola está desatado. Cada vez que escribe una columna, hay mentiras. Cada vez que publica un video, hay mentiras. Cada vez que habla en su programa de radio, hay mentiras.

Su capacidad para emitir falsedades es digna de estudio.

Hoy, por ejemplo, sin ninguna prueba, afirmó que la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, estalló con el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, y que le dijo como si fuera una telenovela: “¡¿Cuándo le vas a dejar de mentir al presidente?!”

Loret hace esta afirmaciones sin una sola prueba, sólo su palabra, y su palabra -hay que decirlo- siempre se ha caracterizado por sus mentiras y sus montajes.

La intención de Loret es minar la credibilidad de Hugo López-Gatell, y dar a entender que, las cifras de fallecimientos por covid-19 en México son mucho mayores. Por eso escribe en su columna: “los datos de la doctora Sheinbaum mostraban que la situación del coronavirus en la zona metropolitana de la capital del país es muchísimo más grave de lo que informaba noche a noche el doctor López-Gatelle”.

Todo lo mencionado por Loret de Mola es sin una sola prueba, sólo su palabra y su típico “alguien me lo contó”.

Incluso, Loret se adelanta a las críticas que pudiera recibir por sus mentiras: “Es muy probable que, por ser de gobiernos del mismo partido, tanto Sheinbaum como López-Gatell nieguen el encontronazo. Eso hacen siempre los políticos del mismo bando cuando se pelean, y ha sucedido en todos los sexenios”.

Después de echarse la mentira de que hay “un gran pleito”, Loret de Mola repite eso de que existen más muertes que las registradas oficialmente, y que la situación es un caos, que no hay espacio, que todo está mal.

Carlos Loret de Mola sabe que atacando a López-Gatell puede minar la credibilidad del gobierno de México en su lucha contra la pandemia. Por eso ha emprendido esta guerra.

La cuestión es que Loret de Mola no critica a un gobierno como lo haría un periodista serio y responsable, es decir, con hechos, con datosy con reflexiones. No, lo que hace Loret es emtir mentiras. Sólo con mentiras.

Loret de Mola es un mentiroso. Y nunca, jamás se le va a quitar.

Él no realiza periodismo. Ni es opinión periodística. No, lo que hace él son montajes, y mentiras.

Es un mentiroso. Eso es lo que es. Ni más. Ni menos.

Ex compañeros desconocen su compartamiento y muchos lo tachan de mal compañero, como en algún momento lo hizo Martha Guzmán, quien lo tacho de incongruente, vendido, arrastrado y no menos misógino.

Con información de Polemon.mx